En una entrevista con la Confederación de Fútbol vecina, Marina Gusson relata su experiencia cómo la psicóloga del seleccionado femenino mayor y sus funciones bajo el mando de Pia Sundhage.
Por Lucio Orlando.
Se viven tiempos de cambio en la estructura interna de la selección femenina carioca. Meses después del pedido de ayuda de Marta tras quedar eliminadas del Mundial de Francia, la Confederación Brasileña de Fútbol comenzó a introducir modificaciones necesarias en la disciplina protagonizadas por la contratación de la legendaria entrenadora Pia Sundhage y la introducción de la igualdad de pago entre sus elencos.
Sin embargo, también ocurrieron modificaciones más pequeñas que favorecieron a la construcción del buen ambiente que se respira en cada uno de los entrenamientos Verdeamarelos. Uno de estos fue el fichaje de Marina Gusson, psicóloga deportiva que se sumó al prestigioso cuerpo técnico en 2019.
Su función está relacionada con la ayuda que pueda proporcionar al desempeño de los atletas en el campo de juego, combinando el bienestar psicológico con otros aspectos esenciales para sobresalir deportivamente, como el acondicionamiento físico y entendimiento táctico.
El debut con la selección mayor se produjo en los encuentros amistosos frente a México, disputados durante diciembre del año pasado, lo que le permitió introducirse al equipo en el ambiente ideal para ejercer su función: “Una convocatoria es un entorno ideal para crear nuevos vínculos porque tenemos momentos más informales que permiten un contacto más directo entre los integrantes del plantel”, explica.
“El principio de mi labor tiene que ver con conocer a cada deportista y saber cómo se enfrenta a situaciones de presión causadas por el rendimiento”, declara la doctora con más de 16 años de experiencia en su campo y destaca que es necesario encontrar un balance entre “las emociones y de los pensamientos para tener un mejor desempeño en la cancha”.
Además, su trabajo también le propone desafíos por fuera de las conversaciones individuales que mantiene con las jugadoras convocadas: Gusson propone actividades para desarrollar aspectos determinados de la psicología, rompiendo los prejuicios que puedan tener los individuos en relación con la disciplina mental.
“El trabajo está siendo muy interesante porque es posible conciliar esta percepción de cómo es el día a día de una convocatoria, el entrenamiento y el backstage. Al estar siempre cerca de las deportistas, se acaba rompiendo esta visión del psicólogo y facilita la formación de un vínculo y la confianza”, continúa.
Poniendo como objetivo principal una mejor preparación para los postergados Juegos Olímpicos de Tokio, Marina también actúa de puente cultural entre el cuerpo técnico compuesto por la entrenadora sueca y las principales estrellas del seleccionado brasileño.
“Pia tiene claro que crear un equipo campeón no solo comprende tener un plantel que sea física, táctica y técnicamente fuerte. Esto es importante, pero no es suficiente. Ella autentifica mi trabajo, escucha y pide una devolución constante, considerando e implementando los consejos que nosotros proporcionamos”, finaliza.
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